Aumentar la productividad de los colaboradores con base a espacios diseñados con un enfoque humano

Aumentar la productividad de los colaboradores con base a espacios diseñados con un enfoque humano

Desde los inicios de la concepción de la cultura empresarial, una de las métricas para las empresas se ha centrado en el grado de productividad de sus colaboradores y, conforme ha pasado el tiempo, queda evidenciado el hecho de que existen muchas estrategias para poder estimular la productividad, la cual se ve reflejada en una empresa rentable y con finanzas sanas. Una de estas estrategias, de acuerdo con el estudio implementado en el año 2017 “Workplace Powered by Human Experience” desarrollado por JLL (Jones Lang LaSalle), empresa enfocada en los servicios inmobiliarios con presencia mundial, más allá de solo crear espacios de colaboración, sino que también éstos fomenten la creatividad, los intereses colectivos y el bienestar.

De acuerdo con Brown (2010) el incremento de la productividad de los colaboradores está relacionada directamente con el grado de bienestar que éste experimenta a través del espacio. El bienestar, lo podemos definir como “un estado de completa plenitud física, mental y social”, con base en la Organización Mundial de la Salud (OMS). El bienestar tiene muchas vertientes y, en lo que al que podría atribuirse al colaborador con base al enfoque que estamos desarrollando, hablaremos del bienestar laboral.

El bienestar laboral, es definido por el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social del Gobierno de España (2019) como “estado de satisfacción que logra el colaborador en el ejercicio de sus funciones. Es producto de un ambiente laboral agradable y del reconocimiento de su trabajo, que repercute en un bienestar familiar y social”. Las organizaciones cuya pretensión es propiciar el bienestar en el trabajo, han desarrollado programas o planes estratégicos enfatizando el compromiso e impulso por propiciar esta condición, los cuales contemplan el manejo de un esquema de comunicación participativa, implementación de cursos de formación laboral, desarrollo de actividades extra laborales, que éstos se relacionen entre sí y fomenten la confianza entre ellos, así como una cultura de reconocimiento y validación de sus logros, sin embargo, se omite una condición importante, el espacio.

Siguiendo con lo que el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social del Gobierno de España (2019) señala dos puntos importantes para propiciar bienestar laboral en sus colaboradores:

“Hacer cambios en el espacio de trabajo, no solo de mobiliario, que ya debe estar ajustado a la normativa, sino que además añada un plus de confort, de estética y ser práctico. Además de facilitar zonas de descanso y comida agradables, en las que realmente se puedan desconectar de sus tareas.” (p. 6).

Podemos observar que el diseño del espacio es una característica elemental para fomentar el bienestar laboral y, por ende, aumentar la productividad del colaborador. Para esto, podemos relacionar el concepto de que se debería pensar también en espacios destinados a optimizar la productividad a través de la satisfacción personal y esto solo podrá ser posible a través de la arquitectura con un enfoque humano, en donde se desarrolle el proyecto del espacio con base a las necesidades y en sus usuarios, es decir, en sus habitantes, que en este caso serían los colaboradores de la organización.

Cuando hablamos de una arquitectura con un enfoque humano aludimos a lo que dice Verón (2013:32), “es el espacio físico en donde el usuario se desenvuelve”, por lo que además de tomar en consideración el desarrollo y gestión del diseño de proyectos arquitectónicos de corte laboral condiciones climáticas, estructurales, contexto del espacio, se debe considerar las necesidades cognitivas y del uso que el colaborador necesita solventar, es decir, al tipo de experiencia que éste tendrá cuando habite el espacio, el tiempo que pasará en éste, el tipo de tareas y como se puede sentir al momento desarrollarlas.

A partir de todo esto podemos decir, que si las empresas desean impulsar el crecimiento de la productividad de sus colaboradores es importante desarrollar espacios que cubran las necesidades de satisfacción y bienestar de los mismos, sin ceñirse exclusivamente a planes de formación de capital humano. Para esto, se pueden valer de profesionales que tomen en consideración durante el proceso de diseño y desarrollo de proyectos arquitectónicos las necesidades de los habitantes (usuarios), ya que el centrar parte de las decisiones de diseño del objeto al usuario fomenta la funcionalidad en la estructura y la forma del espacio arquitectónico al comprender de una manera más profunda y significativa la propia función que éste cumple en la vida del usuario y contribuir a su bienestar promoviendo la productividad del mismo.

Referencias:
Brown, Z., Cole, R. J., Robinson, J., & Dowlatabadi, H. (2010). Evaluating user experience in green buildings in relation to workplace culture and context. Facilities.
Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social del Gobierno de España. (2019). Bienestar laboral. https://saludlaboralydiscapacidad.org/wp-content/uploads/2019/04/riesgos-bloque-3-bienestar-laboral-saludlaboralydiscapacidad.pdf
Powered by Human Experience 2017. (2017). JLL. https://humanexperience.jll/wp-content/uploads/2018/02/7686-JLL-HUMAN-EXPERIENCE_GLOBAL-REPORT_SPS_A4_V5.pdf
Verón, C. (2012). Investigación + Diseño = Arquitectura Ensayo sobre la investigación y el diseño centrado en el usuario aplicado a la arquitectura. Taller Servicio 24 Horas, 8(15), 15–28.

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